Los mejores productos con la mejor compañía
Este pasado viernes 13 de abril, celebramos el primero, del que esperamos sean muchos, Afterwork.
La cita consistía en un encuentro informal después del trabajo, para relajarnos, degustar y descubrir nuevos productos de nuestra tierra.
El encuentro se llevó a cabo en el espacio del 7 de Ribera, un espacio único en Móra d'Ebre, rodeados por la calidez de los materiales característicos de la zona, la piedra y la madera, y el escaparate de los productos de nuestras tierras. El río a tocar de la tienda nos acompaña y juntamente bajo la atenta mirada del castillo que se encuentra situado en pocos metros, propician uno de los mejores contextos para rodearnos de nuestra cultura y nuestra natura. Un momento ideal para visitar esta agrobotiga, puesto que el río se encuentra en su nivel más alto, confiriendo un imponente espectáculo de fuerza y contundencia que nos sirve de recordatorio que la fuerza de la naturaleza es imparable.
Con la colaboración de la bodega Suñer, llevamos a cabo una cata de vinos con degustación de los productos cultivados y elaborados con la ilusión y delicadeza propia de nuestros artesanos. Esta selección de productos la podéis encontrar en nuestra página web y a la agrobotiga del 7 de Ribera.
4 vins únics i 4 plats elaborats amb imaginació, i dissenyats per maximitzar els gustos en el nostre paladar.
Uno de los primeros vinos que tuvimos el placer de degustar fue el vino blanco Macabeo. Un vino joven, brillando, fresco, intenso y persistente. Lo acompañamos de uno de los platos estrella de la noche, unos huevos estrellados con setas. Un plato elaborado con productos ecológicos de primera calidad que despertaron admiración entre los asistentes, un comienzo inmejorable por nuestra velada enogastronòmica.
El segundo vino, fue lo inconfundible vino blanco Acàsia. Un vino monovarietal, de la variedad insignia de las Tierras del Ebro, el macabeo. Su aroma a fruta blanca y cítricos armoniza con notas florales obsequiadas por la madera de la acacia. Una apuesta única, que los de la bodega Suñer han acertado sin duda. El segundo plato para acompañar este vino tan excepcional fue uno de los platos más famoso, sin duda, de nuestras comarcas, la "clotxa". Su reinado impera sobre la Ribera de Ebro inconfundiblemente, elevándolo a patrimonio de esta comarca. Una mini "clotxa", que mezcla el sabor dulce del tomate, la cebolla y el ajo, con la salobridad de la sardina de casco, todo regado con el oro líquido que producimos en esta zona, el aceite de hoja de sauce, variedad original de nuestra comarca. ¡Una explosión de sabores que no deja indiferente… los que la prueban, repiten!
En este punto pasamos a los negros. En tercer lugar, el Suñer Merlot, un vino joven y ecológico, cultivado al lado del río. El resultado de esta viña en situación privilegiada, es un vino con equilibrio aromático, muy agradable al paladar y con el carácter propio de nuestra tierra. Acompañamos este vino joven, con unas croquetas de arroz y brécol ecológico, con un toque de gusto lejano que le aporta una especie a la cual no estamos acostumbrados, la cúrcuma. Esta especie se ha hecho un nombre propio en los últimos años, gracias a sus innumerables propiedades y su sabor.
El siguiente vino, el Mosca Negra. Con mucho de cuerpo y una presencia impecable en el paladar, se trata de una crianza, que como reza su hashtag, es un vino que te encenderá! No solo destaca por su nombre, este es sin duda un vino que se queda en el recuerdo.
Este vino lo acompañamos de un plato con una presentación que no se queda atrás de su acompañante. A la altura de este vino estuvo el rulo de pollo con setas que descansaba sobre una tostada con paté de berenjena. Una experiencia única por nuestros sentidos, la textura suave de este plato contrastaba con el crujiente de su base, mezclando texturas y sabores, que nos van a deleitar.
Por último, la bodega Suñer, nos llevó una propuesta original y diferente como fue lo mohito de vino rosado. Una excelente idea que sorprendió a todos los asistentes por su frescura, su sabor y su color. Esta propuesta tan innovadora la acompañamos de uno de los postres más tradicionales de nuestra comarca, el pastelillo. El nuez y el viejo se unieron para poner el punto final a nuestro encuentro, dejando uno de los mejores sabores de boca y las ganas de volverlo a repetir.
Esta primera presa de contacto fue todo un éxito de asistencia y de calidad de los productos ofrecidos.
Tanto la bodega Suñer, como el 7 de Ribera y nosotros, BiosferaComestible, queremos dar las gracias a todos los que hicieron posible este acto, a la asistencia de todos los participantes y el buen recibimiento que tuvo nuestra propuesta.